Climatización radiante. ¿qué es y qué ventajas aporta?

Climatización radiante ¿Qué es y qué ventajas aporta?

Los sistemas de climatización radiante son soluciones que se basan en controlar la temperatura de alguna de las superficies internas de un edificio o paramentos para contrarrestar el calor o el frío que penetra en el interior, transmitiéndose a través de los cerramientos, por renovaciones e infiltraciones del aire exterior o por generación interna.

Este sistema, diseñado para proporcionar calefacción y refrigeración a través de una superficie radiante, basa su principio de funcionamiento en la impulsión de agua a media temperatura (sobre los 40° en invierno y 16° en verano) a través de una serie de circuitos de tuberías plásticas.

A diferencia de otros sistemas, la climatización por suelo, paredes y techo radiante establece los intercambios de calor por radiación con el cuerpo humano y con el resto de las superficies dentro de una estancia lo que contribuye a generar un ambiente mucho más confortable para los usuarios.

Dentro de estos sistemas, una de las soluciones de climatización más novedosas es la que permite integrar sistemas radiantes mediante la instalación de paneles radiantes tanto en las paredes como en los techos.

Mediante estas soluciones se pueden obtener importantes ahorros energéticos en comparación con el sistema por radiadores convencionales.

Paneles radiantes para paredes y techos

Los sistemas de climatización con paneles radiantes para paredes y techos son en la actualidad una de las alternativas más eficientes para calentar y refrigerar una estancia.

Estos paneles están disponibles en dos versiones; una metálica y otra de cartón yeso o pladur. La primera está destinada a instalaciones del sector terciario como oficinas, comercios, hospitales o colegios mientras que los paneles de pladur, se dirigen al segmento residencial por su componente más decorativo.

En apariencia, los techos radiantes son similares a los falsos techos con la diferencia de que los primeros incorporan los difusores térmicos y un sistema de control para regular la temperatura superficial de los paneles.

Con respecto a otros sistemas como el suelo radiante, los sistemas con paneles para paredes y techos tienen la ventaja de ser más económicos en una reforma o rehabilitación ya que no es necesario levantar suelos, su instalación es muy sencilla y su reparación en caso de avería, también.

Además, a diferencia de los suelos radiantes los paneles de techo o pared tienen un tiempo de respuesta muy rápido puesto que el calor no debe pasar a través de ningún otro material que no sea el propio panel.

Son además soluciones que se pueden combinar con otros sistemas como calderas de condensación, bombas de calor aire-agua (aerotermia) e incluso paneles solares consiguiendo de esta forma un sistema de climatización renovable.

Principales ventajas de los paneles radiantes

Los sistemas de climatización con paneles radiantes son, cada vez más, una opción a considerar en cualquier proyecto de rehabilitación por las ventajas que aporta desde el punto de vista constructivo y de su instalación. Así:

  • a diferencia de los sistemas de convección, con el calor radiante se calientan en primer lugar las personas y objetos de una estancia
  • producen un reparto de calor uniforme por toda la estancia
  • se pueden combinar con otros sistemas de climatización incluyendo los de generación renovable como la aerotermia o la solar
  • son sistemas idóneos para viviendas con problemas de humedad en paredes exteriores ya que actúan como barrera térmica
  • su instalación y mantenimiento es muy sencillo por lo que son idóneos para proyectos de rehabilitación y reforma
  • son sistemas que proporcionan un elevado confort térmico en cualquier tipo de edificación, silenciosos e invisibles
  • proporciona un importante ahorro energético con respecto a otros sistemas tradicionales
  • se utilizan para la climatización de viviendas pero también en el sector terciario (oficinas, hoteles, comercios, etc.)
  • sus emisiones de CO2 a la atmósfera son más reducidas
  • los sistemas de climatización radiante no resecan el ambiente ni mueven el aire por lo que los movimientos de partículas son muy reducidos. Esto redunda en una calidad del aire interior y un ambiente mucho más saludable.

En conclusión, los sistemas de climatización radiante para calefacción y refrigeración son soluciones tecnológicas innovadoras y versátiles, idóneas en proyectos de reforma y rehabilitación y que proporcionan además elevados rendimientos.

Su aplicación en combinación con sistemas renovables convierte a este tipo de climatización en una de las alternativas idóneas en proyectos encaminados a obtener el mayor nivel de sostenibilidad y por tanto, una mejor calificación energética para la vivienda.

Scroll al inicio